Capilla de San Nicolás

Experiencia fantástica: En un códice guardado en el Archivo Municipal de Guimarães, se puede leer que 'la Capilla de San Nicolás fue hecha por los Estudiantes de esta Villa y otros devotos con dinero que ganaron en comedias y danzas que, por devoción al Santo y aumento de la Capilla, aceptaban el dinero que les daban'. Al igual que se imponía en la época, los Mayordomos de la Hermandad de San Nicolás se dirigieron a los miembros del Cabildo de la Colegiada de Guimarães, mediante una petición del 20 de mayo de 1662, mencionando su intención de construir la capilla y 'les pedían a los mencionados Reverendos Señores del Cabildo que les hicieran la merced del sitio para ella'. Esta se levantaría del lado derecho de la iglesia de la Señora de Oliveira, 'apoyada a la Sacristía, junto a la Capilla de Santo Esteban, en el jardín que es del Sacristán'. Y tras todas estas diligencias, la Capilla fue concluida en 1663. Así se mantendría hasta 1970, momento en el que, tras la intervención de los Monumentos de Portugal en la Iglesia de la Señora de Oliveira, esta sería desmantelada. Gracias a la sensibilidad de Monseñor Araújo Costa, entonces Arcipreste de Guimarães, las piedras de la capilla destruida serían, por su iniciativa, numeradas y ordenadas en las huertas del Arciprestazgo. Después de un largo proceso, iniciado en 1974 por la Hermandad de San Nicolás, la Asociación de Antiguos Estudiantes del Liceo de Guimarães, el Ayuntamiento de Guimarães y todas las fuerzas vivas de la ciudad, la capilla sería reedificada en el mismo lugar de origen, en 1998.

Experiencia positiva: Iglesia en el centro de Guimaraes. Tiene una bonita torre que conjunta con el Padrao do Salado.

Experiencia fantástica: Construida en el siglo XVII (1661 a 1663). Obra en granito, anexa a la iglesia de Nossa Senhora da Oliveira, fue construida por los estudiantes de la ciudad en honor a S. Nicolau.

Experiencia negativa: La capilla de Sao Nicolau se encuentra en un pequeño patio al lado de la iglesia de Oliveira; en principio, siempre está cerrada al público.

Experiencia positiva: El centro histórico de Guimaraes. Tiene una plaza en su frente con numerosos establecimientos de hostelería y recuerdos. Lugar de obligada visita.

Experiencia positiva: Pasé por aquí mientras esperaba la cena. No pude moverme mucho durante la misa, pero la atmósfera era excelente.