Museo de la Casa y Escuela Rural de Tielmes

Experiencia fantástica: Un rinconcito curioso. El señor que lo explica es un encanto, lleno de sabiduría. Totalmente recomendable la visita. Con la entrada están incluidas La casa cueva y la antigua escuela, solo cuesta 2 eurillos.

Experiencia positiva: Al visitar Tielmes entre los lugares que nos llevaron a ver fue esta casa, que antaño fue la Escuela del Pueblo y más tarde casa del maestro. Por supuesta está reconstruida pero es fiel en todo a los que fue en su día y lo encontré interesante. Rescate de mi memoria algunas cosas conocidas otra simplemente vistas en ilustraciones. Ver los pupitres, carteras, tinteros plumillas, libros siempre dejan cierta nostalgia al comprobar el paso del tiempo. Nada comparable con un colegio actual. Muchos de los objetos según nos contaron fueron aportados por gentes del pueblo. Al restaurarla aparecieron, en la pared de la balconada del primer piso, unos frescos, pintados en negro, con imágenes de soldados con uniformes de la época. En el primer piso la casa del maestro, también está bien ambientada ambientada y con ropajes y utensilios de la época.

Experiencia fantástica: Me ha encantado

Experiencia positiva: Interesante edificación, reconstruida, de lo que fue la Escuela del Pueblo y mas tarde casa del Maestro, en el lugar donde estuvo la antigüa Iglesia del Pueblo. Al restaurarla aparecieron, en la pared de la balconada del primer piso, unos frescos, pintados en negro, con imágenes de soldados con uniformes de la época. Dentro, se ha recreado lo que era la escuela, con un banco-pupitre original, libros, enciclopedias, tinteros, plumillas, cuadernos, etc., muchos de ellos aportados por la gente del pueblo. En el primer piso esta la casa del maestro, también muy bien ambientada y con los útiles y utensilios de hace muchos años. La persona que la enseña es la misma que está en la Casa Cueva y que reparte su tiempo entre las dos ubicaciones. Pueblo entretenido para pasar una tarde diferente, sin mas pretensiones.

Experiencia positiva: La fachada, que es lo único que he visto, no es algo que invite al optimismo.